Lo llaman Kudai, otros Codi, pero su nombre real es Daniel Gutiérrez y es un apasionado del skateboarding. Los jóvenes que practican este deporte lo reconocen como uno de los más diestros en la tabla. Todos los días, después del trabajo, se traslada a la plazuela Hernando Siles de Quillacollo, más conocida como plaza de las Sirenas, que es su segundo hogar.

Él incursionó en el skateboarding gracias a un amigo y hoy es unos de los mejores, según el ranking del Urban Fest, instancia que organiza concursos de esta disciplina en los departamentos de La Paz, Tarija, Santa Cruz y Cochabamba. El 2016 ocupó el primer lugar de la lista.

Daniel sobresale del resto porque tiene una perfección única en los trucos que realiza, como el grinds (barrido de la tabla por los fierros), skate fail, melón grap, lipslide, salad, bigspin y kickflip, entre otros. En sus piruetas favoritas está el Flip 360, que consiste en saltar sobre la tabla y que ella gire 360 grados tanto en sentido vertical como horizontal.

Hoy es un día más de distracción, pero también de perfeccionamiento. Sube a la tabla y se desplaza por todo lado, se impulsa con el pie izquierdo y con el otro direcciona el movimiento. Las piruetas empiezan a salir siempre encumbradas de halagos, aplausos y felicitaciones de su improvisado público.

Desde hace dos años y medio, Daniel es auspiciado por dos tiendas locales: el “Urband Chaos”, que le otorga prendas de vestir, ruedas, rodamientos y algo de dinero para sus viajes; y el “Sumaj Skateboarding”, que le proporciona las tablas.

Kudai cuenta que en otros países, hay jóvenes que viven únicamente de su pasión. “Solo practican, practican, siguen practicando y les pagan, les pagan muy bien. Sueño con llegar a ese nivel”.

ENTRENAMIENTO Con la construcción del Parque de la Familia, antes Zoológico y posteriormente Parque del Niño, se eliminó la única pista para bicicross, rollers y sketers que los jóvenes tenían.

Cada sábado, a partir de las cuatro de la tarde, el parque se colmaba del bullicio de las ruedas. Hoy, su lugar de entrenamiento fue anulado y los jóvenes migraron a otros espacios improvisados, como la plaza del Granado, la plaza Cobija, de las Sirenas y otros lugares donde los vecinos no los desalojen argumentando daños al espacio público.

Con un poco de esfuerzo, los grupos de jóvenes construyeron algunos obstáculos en las plazas, para mejorar su práctica.

“Hemos puesto cemento, fierros y uno que otro ladrillo. Hay que darse modos porque es difícil cuando no hay una pista”, dijo Daniel.

En la ciudad de La Paz, el 7 de junio del 2014, con ayuda de la Embajada de Alemania, se inauguró el Skatepark (parque de skate), que hoy es publicitado como “la pista más alta del mundo”.

Durante la pasada gestión municipal, se prometió la construcción de un parque, con una pista exclusiva para este deporte. “Se presentó una maqueta con todos los detalles, pero después de tres años, todo quedó en discurso del Cholango”.