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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 22:24

Más enfermedades por consumir alcohol

Sobrepeso, irritabilidad, resistencia a la insulina y diabetes son algunos de los males que aumentan entre los alcohólicos. 
Más enfermedades por consumir alcohol





La ingesta excesiva de alcohol puede alterar el ritmo con el que los tejidos se sincronizan para realizar funciones fisiológicas como la alimentación, lo que puede provocar diversas enfermedades, reveló una investigación del Instituto Politécnico Nacional (IPN) de México.

Iván Villanueva Becerril, investigador de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), explicó que el alcohol puede provocar alteraciones en los ciclos circadianos, lo cual incrementa el riesgo de sufrir sobrepeso, irritabilidad, deficiencias cognitivas, resistencia a la insulina y diabetes mellitus tipo 2.

El especialista explicó que los ciclos circadianos son cambios fisiológicos que ocurren cada 24 horas en el organismo, en el que intervienen y se sincronizan los tejidos del cuerpo para cumplir funciones específicas. "Estos cuentan con un mecanismo de reloj endógeno que les marca el tiempo diario y determina en qué momento actuar", señaló.

En condiciones normales, los tejidos mantienen una relación de ajuste temporal constante, que inicia cuando sale el sol y disminuye cuando no hay luz, por lo que estos mecanismos se aceleran al despertar y bajan la intensidad al dormir.

"Sin embargo, los resultados mostraron que tras una intoxicación de alcohol, las fases circadianas tardan más en completarse y en iniciar el próximo periodo", detalló Villanueva Becerril.

El investigador realizó experimentos con ratas, en donde comprobó que la ingesta etílica favorecía la actividad gabaérgica cerebral, un mecanismo que reduce la actividad neuronal y estimula el mecanismo inhibitorio.

El té con té y el cáncer de esófago 

Un consejo que podrían agradecer los amantes del té: dejarlo enfriar antes del primer sorbo.

Y es que un estudio advierte que consumirlo muy caliente incrementa el riesgo a desarrollar cáncer de esófago si se combina con alcohol (té con té) y cigarrillos.

Los hallazgos, basados en el seguimiento a largo plazo de más de 450.000 participantes, se publicaron en Annals of Internal Medicine.

Los investigadores descubrieron que las personas que consumieron té y también fumaron tabaco y bebieron cantidades excesivas de alcohol tuvieron cinco veces más riesgo de cáncer de esófago que las personas que no tenían ninguno de estos tres hábitos.

El cáncer de esófago está aumentando en prevalencia y su tasa de supervivencia es bastante baja, particularmente en regiones menos desarrolladas y en varones.

La combinación de los tres productos está relacionada con un mayor riesgo de carcinoma de células escamosas del esófago, que son las células que revisten el esófago.

La investigación sugiere que el consumo frecuente de líquidos hirvientes puede provocar lesiones a largo plazo en las células que recubren el esófago, dijo a BBC el autor principal del estudio, Jun Lv, epidemiólogo del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Pekín.