Vecinos de Tiquipaya están atemorizados tras la caída de mazamorra, la noche del jueves. Pedro, un vecino de la OTB Tika Khatu, contó que escuchó como si dos camiones se chocaran. “El impacto era fuerte. ¡Poc, poc!, se oía. Salí de mi casa y vi que el ruido provenía de las rocas enormes que chocaban. Mis vecinos me alarmaban más porque gritaban que estaba bajando un aluvión. Y sí, estaba deslizándose la mazamorra, pero seguía el cauce del río. El dragado y los disipadores ayudaron bastante, si no se hubiesen construido, otra sería la historia”.

Relató que escuchó las sirenas y los cohetes que advertían que “algo andaba mal”. Vio que sus vecinos descendían y llevaban sus pertenencias en bolsones. Otros caminaban deprisa, con niños y ancianos.

Pedro manifestó que, después de la tragedia del 6 de febrero de 2018, cuando un aluvión de magnitud dejó cinco fallecidos y más de 100 viviendas damnificadas, intentó vender su casa, pero le ofrecieron 40 mil dólares. “Yo compré a 75 mil dólares. Antes del aluvión, una empresa de bienes raíces me ofreció 180 mil dólares, pero confiaba en que ese precio iba a subir”.

El secretario técnico de la Alcaldía de Tiquipaya, Cecilio Salvatierra, indicó que los dos disipadores fueron dañados tras el paso de la mazamorra, pero que realizarán su limpieza y reparación. Añadió que el gobernador Iván Canelas comprometió la construcción de dos disipadores más para brindar seguridad a los vecinos que viven cerca al río Taquiña. El secretario de la Madre Tierra y Medioambiente de la Alcaldía, Andrés Melgarejo, acotó que harán el ensanchamiento del afluente. “Aún no está en sus dimensiones cabales”. Señaló que continúan los trabajos para retirar los agregados.

En tanto, el alcalde Juan Carlos Ángulo adelantó que proyectan construir 14 disipadores, pero que aún se gestionan 14 millones de bolivianos ante instancias del departamento y a nivel nacional. “Serían ubicadas al norte de la cuenca”.



FRANJA Ángulo propuso que se retome el diálogo con los vecinos para ampliar la franja de seguridad del río Taquiña. “El afluente pudo rebalsar hacia las viviendas de los vecinos, otra vez. Darles seguridad es indispensable, ojalá lo puedan considerar”. La presidenta del Concejo Municipal, Margarita Siles, coincidió con la autoridad.

Cerca del río Taquiña hay entre 180 a 240 familias, según un informe que hizo el municipio, en 2018.

Ángulo explicó que el municipio propuso que la franja de seguridad sea de 100 metros a ambos lados desde la Cota 2.750 para arriba. De la Cota para abajo (cerca de 500 metros), se planteó 90 metros, en esa zona es de 60. Y finalmente, hasta la avenida Ecológica se propuso que sea de 30 metros, ahora es de 15.



EMERGENCIA La Alcaldía solicitó al Concejo Municipal la declaratoria de emergencia para que activen los recursos necesarios y atiendan las necesidades.