El vicepresidente Álvaro García Linera calificó como "indignante" el uso de la profesión de abogado para abusar de litigantes, en alusión al caso de Jhasmany T., que lideraba un consorcio criminal compuesto por jueces, vocales, fiscales y policías que se encargaban de dirigir procesos judiciales de forma irregular.

En tanto, el viceministro de Transparencia y Lucha Contra la Corrupción, Diego Jiménez, aseguró que el consorcio criminal movió mucho dinero."Se habla de varios miles de dólares que cobraban estos operadores de justicia para dirigir las resoluciones que les pasaba el abogado”.

Adelantó también que las investigaciones no han terminado y se cree que hay más funcionarios implicados en este caso, contra los que se podría ampliar la indagación.

VICEPRESIDENTE "Es indignante, abominable como se hace uso de la profesión, pero (estoy) muy contento por la velocidad de la justicia con la que está operando ante el menor indicio de corrupción, de maltrato, de abuso", dijo a ABI.

Medios locales identificaron a Torrico como un "abogánster", que estaba en la cárcel de El Abra de Cochabamba desde noviembre del año pasado por el secuestro y extorsión a un mecánico, y que en los últimos días fue trasladado al penal de máxima seguridad de Chonchocoro de La Paz.

Ese abogado, además tiene otro proceso por los presuntos delitos de organización criminal, robo agravado, coacción, vejaciones y tortura, donde la víctima es su propio padrastro.

8 Aprehendidos

Cuatro policías, un fiscal, un vocal y su cónyugue fueron aprehendidos por, presuntamente, formar parte de la red de corrupción manejada por el abogado Jhasmany T. con fines de extorsión.