Hace unos días, una niña de un año y medio de edad fue internada por sus padres en un hospital de Cotoca, un municipio de Santa Cruz, con un cuadro de infección severa. Los médicos examinaron a la criatura y se horrorizaron al detectar que la pequeña presentaba signos de haber sufrido un vejamen sexual.

Pese a los esfuerzos de los galenos y a los antibióticos de última generación que le prescribieron, la niña falleció el jueves 24 de mayo, en el mismo centro hospitalario.

Un médico forense le practicó a la pequeña una autopsia de ley y corroboró que ella fue violada y murió a causa de una infección anal que se generalizó, según informó la directora de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de Cotoca, Gabriela Guzmán. La jefa policial acotó que los padres de la niña, ambos de 19 años, ya fueron aprehendidos como los principales sospechosos del acto criminal, pues ellos mismos declararon que ellos cuidaron de su hija en todo momento y ninguna otra persona se le acercó a solas. Los jóvenes progenitores aseveraron que la bebé no fue violada y pidieron que se investigue en profundidad lo ocurrido. "La niña perdió la vida el jueves al mediodía y el informe de la médico forense confirma que tiene un desgarro anal y se generalizó una infección vaginal, a consecuencia de un abuso sexual", dijo Gabriela Guzmán. La criatura fue llevada al hospital porque los padres no lograron bajarle la fiebre. Los médicos dieron parte de su diagnóstico presuntivo a la Defensoría de la Niñez, quien convocó a los policías de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia el 23 de mayo. Según las pesquisas, la niña fue vejada entre el 18 y 19 de mayo. La víctima agonizó cinco días, con fuertes dolores y una fiebre altísima, pero los padres insistieron en que desconocen las causas.