El Barcelona acusó la resaca copera y sumó su segundo empate consecutivo en la liga española, al no poder superar (0-0) al Getafe, que se convirtió, tras el Celta, en el segundo equipo que esta temporada puntúa en el Camp Nou.

Ernesto Valverde ya avisó en la víspera que, tras el esfuerzo que tuvieron que hacer sus hombres el jueves en el Mestalla frente al Valencia para clasificarse a la final de la Copa del Rey, la visita del Getafe resultaba inoportuna.

Aun más con las bajas en defensa que tenían los azulgranas, con Umtiti sancionado, Vermaelen aún en la enfermería y un Piqué renqueante desde que se lesionó en la rodilla derecha en el último derbi contra el Espanyol.

El Getafe es de esos equipos que no deja jugar. Lo comprobó el Barça en la primera vuelta, cuando se impuso por 1-2, después de remontar el tanto inicial de los madrileños y lograr el gol del triunfo a seis minutos del final.

Nada que ver con las dos últimas visitas del Geta al Camp Nou. En ambos casos se llevó un sonrojante 6-0. Tras los primeros minutos se vio que ese resultado no iba a repetirse ayer. Los azulgranas dominaron, pero no se acercaron con peligro a la portería defendida por Guaita, protegido por el planteamiento rocoso del equipo de Bordalás, que atascó el juego del Barcelona en cada posesión.

Un posible penal de Bruno a Messi, al cuarto de hora, y un gol anulado a Luis Suárez, por fuera de juego, en la última jugada de la primera mitad, fueron todo el caudal ofensivo local en el primer acto.

No fue el día del Barça y pudo ser peor porque el Getafe tuvo la última ocasión del encuentro en un lanzamiento de falta de Antunes que puso a prueba los reflejos de Ter Stegen.