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  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 09:58

HAY 10 VIVIENDAS DENTRO EL CAUCE EN TIQUIPAYA

Casas siguen en cauce de 2 torrenteras pese a muerte de 3 personas

Las demoliciones no se hicieron y la gente continúa haciendo arreglos de sus propiedades dentro del Parque Nacional Tunari. Una de las casas fue amurallada.
Casas siguen en cauce de 2 torrenteras pese a muerte de 3 personas



Entre rocas gigantescas, cactus y pajonales la gente continúa viviendo en los chalets y medias aguas construidas dentro de las torrenteras Greda Mayu y Huaña K`away, situada en el Distrito 5 de Tiquipaya, y donde el 3 de diciembre de 2016 tres personas perdieron la vida ahogadas por el torrente que pasó.

A casi un año de la tragedia en la zona denominada Lirios del Tunari la situación en la zona no ha cambiado casi nada. Las viviendas no fueron demolidas como la Alcaldía había anunciado y el riesgo para las personas que habitan las casas continúa siendo latente.

Dentro de la quebrada, que está encima de la Cota 2.750 del Parque Nacional Tunari, hay aproximadamente 10 viviendas habitadas de las cuales tres son chalets y el resto construcciones precarias o pequeños cuartos.

Para entrar a las viviendas se debe bajar al cauce, situación que es dificultosa para los forasteros que son atacados por la gran cantidad de perros que los propietarios de las casas crían.

De día las viviendas están deshabitadas, la gente sale a trabajar y retorna en la noche. Los perros son los guardianes de las propiedades.

Solo en un par de casas se observa albañiles que entran y salen, pero se rehusan a hablar. Una de esas viviendas, donde se hacen reparaciones, es la contigua a las medias aguas donde un niño de tres años fue arrastrado por el torrente la tarde del 6 de diciembre y perdió la vida.

Esa casa fue amurallada en su totalidad y el cuarto donde el niño que fue arrastrado por el agua se encontraba fue tapado con calaminas. El municipio y el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap) colocaron tres letreros a lo largo del cauce de las quebradas.

“Servidumbre ecológica, zona no recomendable para construcciones de viviendas”, indican los anuncios.

Cerca a la torrentera también se puede apreciar una nueva construcción aproximadamente a unos 15 metros, cuando la norma indica que la franja de seguridad de esa torrentera es de 20 metros.

La edificación nueva es una propiedad de medias aguas que está a punto de ser terminada.

El director del Sernap, Carlos Espinoza, indicó que estas edificaciones se hacen en horas de la noche o fines de semana para evadir los controles y patrullajes que el personal de esta institución hace.

Indicó que en el caso de la vivienda amurallada se inició un proceso contra los propietarios.

Perros

Las construcciones dentro del cauce que son ilegales son protegidas por perros. La mayoría de las casas está deshabitada de día.

Ni la Alcaldía ni el Sernap realizan las  demoliciones

Pese a estar en riesgo, ni la Alcaldía de Tiquipaya, ni el Servicio Nacional de Áreas Protegidas, (Sernap) realizan la demolición de las viviendas que están dentro de las quebradas Greda Mayu y Huaña K`away. 

El subalcalde del Distrito 5, Gustavo Vargas, indicó que por competencia no les corresponde derribar las viviendas que están por encima de la Cota 2750 del Parque Nacional Tunari (PNT). “hemos notificado hasta tres veces a 500 viviendas en toda esta zona y hasta ahí llegan nuestras competencias”, dijo.

Para evitar otra tragedia, realizaron la limpieza de las torrenteras y se hicieron colmatadores con el objetivo de evitar que cualquier tipo de material sea arrastrado.

Sin embargo, si la cuenca se vuelve a activar el agua podría bajar, por lo que reconoció que hay un riesgo.

Para el siguiente año se gestiona la inversión de dos millones de bolivianos para hacer canalizaciones.

El director del Sernap, Carlos Espinoza, señaló que pese a que las viviendas están dentro del Parque, las demoliciones deben ser realizadas por la Alcaldía, ya que fue ese ente el que les otorgó el derecho propietario hace más de 10 años. “Estas personas tienen papeles que la Alcaldía les ha dado, aunque no hayan sido las autoridades recientes es a ellos a los que les corresponde”.

Manifestó que su tuición es controlar nuevas edificaciones y que las que ya están consolidadas deben ser sometidas a un proceso con el municipio. Señaló que cada Alcaldía se debe hacer cargo de la situación de edificaciones antiguas aunque estén dentro del PNT.

Señaló que el Sernap tampoco cuenta con el equipo y el personal para realizar este tipo de trabajos.

El director de Cuencas de la Gobernación, Enrique Soria, también dijo que de acuerdo al artículo 31 de la Ley 482 de Gobiernos Municipales, las alcaldías tienen dominio sobre sus ríos y lechos desde su coronamiento, es decir desde su inicio.