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  • Diario Digital | martes, 19 de marzo de 2024
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Ecodelivery: Qhochalas que entregan tu correo en bicicletas eléctricas

Ecodelivery: Qhochalas que entregan tu correo en bicicletas eléctricas

¿Alguna vez pensaste que podrías recibir tus envíos de correo a través de una bicicleta? En tiempos altamente tecnológicos, una opción retro no suele ser la primera y menos si lo que intentas es innovar. Sin embargo, hay una empresa cochabambina que quiere darle una vuelta de tuerca, literalmente, a esta idea.  Ecodelivery es una empresa local de entrega de correo en bicicleta eléctrica con una perspectiva acorde a los valores que nos marca esta época: eficiencia y cuidado del medio ambiente.


Miguel Fernández Vásquez, representante de la marca, cuenta cómo surgió su empresa. Como es de esperarse, con todo el contexto en su contra, el principio no fue para nada alentador, porque comenzó perdiendo.

Con la idea de trabajar con electromovilidad, para desarrollar automóviles eléctricos, participó en una carrera solar en Atacama, Chile y no le fue muy bien. Explica que “el problema es que no hay confianza y nadie se anima a trabajar con vehículos como los que tenemos”. No obstante, insitió en su sueño y le dio un enfoque. Así cambió la historia.

Por eso es que dio un viraje al negocio y decidió desmontar alguno de los autos eléctricos y usar sus motores para colocarlos en las bicicletas para demostrar la eficiencia y la capacidad de lo se podría tener con una bicicleta de este tipo.

Con el ejemplo en los pies, ha expuesto cómo funcionan los equipos y tiene un objetivo muy claro: hacerle la competencia directa a los servicios de mensajería comunes gracias a su sistema de bicicletas eléctricas ahora integradas al servicio de reparto denominado Eco Delivery.


La empresa

Eco Delivery comenzó en diciembre de 2016 y oficialmente trabaja desde el día del peatón del pasado mes de abril. comienzan a las 09:00 de la mañana y cierran a las 19:00, pueden hacer entregas tardías con instituciones socias y está legalmente establecidos.

El personal, compuesto principalmente por estudiantes, tiene un sueldo por las horas que trabaja y no pelea por adelantarse o hacer más pedidos, o subirle el precio el cliente, ellos cobran lo que se pacta con el cliente.

Trabajan en su tiempo libre y durante las horas que no hay entregas se les da acceso a mesas de trabajo, WiFi, televisión y un espacio donde esperan y se ocupan de sus asuntos.

Sus clientes son el Servicio Integrado de Energía S.A., Phocos Latinoamérica SRL, la ONG Energética, la Asociación Boliviana de Energías Renovables (ABER) y algunos miembros de ABER que se están animando para tener un servicio constante. Fernández también destaca que “la Feicobol ha sido uno de los primeros clientes”.

Personal

El equipo está integrado por ocho personas, pero no se trata tan solo de Eco Delivery sino que la empresa pertenece a una consultora más grande que se llama Renovación Sostenible y empezó después de la carrera de 2014.

“Ahí surgió la idea de trabajar con esos temas y fundé la consultora, pero no hubo la respuesta esperada y lanzamos el servicio de mensajería con una marca e identidad propias”.

La consultora trabaja en tres áreas, una de ellas es Eco Delivery y gracias a la buena respuesta obtenida han desarrollado otra área que se dedica a la electro-movilidad instalando más de diez bicicletas eléctricas en la ciudad a diferentes personas que se animaron a cambiar y probar alternativas ecológicas.

La consultora está desarrollando vehículos eléctricos para el Parque Nacional Kaa Iyá donde se hace turismo de fotografía en autos que puedan llevar a los turistas de un lugar a otro sin contaminar.

Fernández explica que “este parque se encuentra en Santa Cruz y tiene apenas 15 kilómetros de carretera y la gente paga por recorrer esos kilómetros a una velocidad muy lenta, entre 10 y 15 km/hora porque la idea es sacar fotos a los animales silvestres que aparecen en el camino, ahora lo hacen con vagonetas 4×4 pero hacen ruido, contaminan, están al lado del gasoducto y es un problema porque espantan a los animales. Hemos sacado una propuesta para tener vehículos para más personas y que no hagan ruido”.

El proyecto depende de la respuesta del parque, que se enfrenta al problema de romper el paradigma sobre el uso de autos impulsados a gasolina y los autos eléctricos. Fernández es de la idea que hay que cambiarlo y optar por las energías renovables.

Futuro

El mercado potencial es gigantesco, sostiene su fundador, porque pueden ofrecer cosas que otros no lo hacen, explica que la bicicleta es más barata y ágil en el centro de la ciudad y se hacen entregas más rápidas, con un impacto distinto. Ejemplifica que trabajan con varias florerías y es mucho más simpático – añade Fernández- que llegue una flor bien cuidada y no revuelta como un jugo. Hicieron 100 entregas el primer mes, el segundo 150, el tercero 200 y el último mes más de 300.

A futuro quieren construir cinco sillas de ruedas eléctricas a un precio menor que el que se encuentra en el mercado internacional.