Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 29 de marzo de 2024
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Renuncias, asunciones confusas e incertidumbre en el fútbol nacional

El adiós de Marco Peredo a la presidencia de la FBF, el nombramiento de Carlos Ribera como interino del ente rector y la inhabilitación por segunda vez de Guido Loayza a la silla ponen tensión en el balompié boliviano.
Renuncias, asunciones confusas e incertidumbre en el fútbol nacional



La renuncia de Peredo a la Federación Boliviana de Fútbol (FBF); la designación del nuevo interino, Carlos Ribera; la insistencia por la intervención de la FIFA y Conmebol; y la segunda inhabilitación de Guido Loayza a la silla presidencial del ente federativo son los acontecimientos que generaron “mayor inestabilidad” y una especie de “crisis” en la dirigencia del balompié nacional.

Unos hablan de “corrupción”, otros de “favoritismo” y algunos de “cambio de estructuras”, lo cierto es que a 23 días de los comicios eleccionarios, el fútbol boliviano atraviesa uno de sus momentos más difíciles a nivel institucional.

La situación del deporte rey en el país ingresó en declive, aún más, cuando Futbolistas Agremiados de Bolivia (FABOL) decidió “frenar” la Liga por una deuda de 1.5 millones de dólares de clubes a jugadores.

Esto originó que el cruceño Marco Peredo, interino de la FBF desde comienzos de año, decidiera renunciar al ente rector del balompié nacional y a la Liga indicando que “hay mucho despelote” en el interior de esta institución y que “nadie quiere el cambio de estructuras”.

“Para mí es difícil trabajar en esas condiciones. Por eso me voy con mi balón a jugar a otro lado donde la gente sí quiera hacer cambios”, dijo, de manera decidida, tras anunciar su salida de la dirigencia.

Peredo, quien era interino hasta el 11 de agosto, recibió recientemente “el ok” por parte de la FIFA para que siguiera a la cabeza del fútbol boliviano con el objetivo de continuar con el proceso eleccionario que se está llevando a cabo y para que exista “estabilidad” en el entorno, cuestión que no se dio.

El paro de FABOL y la renuncia de Peredo pusieron en aprietos a la dirigencia en general. En eso, la Primera División se reunió en Consejo Superior y nombró a Carlos Ribera, dirigente de Oriente Petrolero, como nuevo interino de la Liga y de la FBF, luego de recibir el apoyo de 8 de los 12 clubes ligueros, haciendo que la FBF siga en “manos” de dirigentes del oriente.

Marco Rodríguez, secretario general de la FBF, indicó que estos hechos son de conocimiento de la Conmebol, pero también se pronunció por medio de una carta institucional que Ribera no puede ser interino de la FBF, pues por sucesión debe tomar el mando el presidente de la Asociación Nacional de Fútbol (ANF), Freddy Cortez.

Incluso, Freddy Téllez, secretario General de la Liga, rechazó la decisión de que Ribera tome las riendas, pues, también por sucesión, él debía ser quien comande el segundo organismo de fútbol que tiene el país.

A Téllez lo desconocieron porque, supuestamente, faltó a cuatro consejos superiores de la Liga, siendo tres el tope máximo de ausencias de acuerdo con el reglamento interno.

“La idea es cambiar el fútbol boliviano y salir del hondo hueco en el que se encuentra. No importa si estoy yo o Cortez. Hay que sacar adelante esto”, manifestó Ribera, quien remarcó que “una comisión normalizadora de la FIFA” intervenga en estos procesos que están siguiéndose en Bolivia.

Todo el conflicto gira en torno a las elecciones a presidente de la FBF, del 15 de septiembre, del que por segunda vez ya fue inhabilitado el directivo paceño Guido Loayza.

El Comité de Apelaciones de la FBF rechazó la impugnación que el académico presentó por su primera inhabilitación hace más de una semana.

Se conoce que Loayza fue suspendido de estas elecciones por no contar con un plan de trabajo para comandar la entidad.

El titular del Bolívar indicó que la decisión de alejarlo de la carrera por la silla federativa se debe a que “no hay transparencia” en el proceso y que solamente hay “parcialidad y una pugna de intereses de un sector”.

“Seguiremos peleando por el cambio de estructuras de la FBF”.

En el caso de Luciano Negrete, otro de los candidatos, también impugnó su inhabilitación de hace una semana. Recientemente presentó la apelación correspondiente y será el Comité quien decida, en los próximos cinco días, su reincorporación o definitiva suspensión a las elecciones de septiembre.

Por el momento, solamente el atigrado César Salinas es el que está en carrera a la silla presidencial y será, en los próximos días si se ratifica a este solo candidato, quien deberá dar un examen de idoneidad ante las instancias internacionales de la FIFA y Conmebol, a las que se pidió urgentemente que intervengan.

1 Candidato, por el momento, está en busca de la presidencia de la FBF. César Salinas, del Tigre, está habilitado para las elecciones.