Son 100 por ciento “cuervas”. Llevan los colores (azul y rojo) de San Lorenzo de Argentina en la piel, pues es el club en el que militan desde adolescentes. Sin embargo, decidieron hacer un break (descanso, en inglés) necesario porque la propuesta era muy tentadora: representar a Bolivia, el país de sus padres, en los Juegos Suramericanos de 2018 y el “no” era una opción poco ambiciosa.

Las jugadoras argentinas, hijas de bolivianos, Camila Choque, Daniela Carballo y Mercedes González; y las nacionales que radican en el país vecino desde que eran muy niñas Mireyza Cruz y Karen Santos llegaron desde Buenos Aires con la tremenda ilusión de calzarse, por primera vez, la camiseta de la Tricolor, algo que nunca contemplaron que podría suceder.

El “amor” que dijeron sentir por San Lorenzo, institución que les abrió las puertas desde hace más de 10 años, no les impide hoy estar en Cochabamba para aportar con sus conocimientos en el hockey. Y saben que esta es una oportunidad determinante para quedar en el combinado.

No perdieron el tiempo y ya se dieron a la tarea de plasmar en el terreno de juego todo lo que han aprendido en suelo bonaerense, donde estudian, trabajan y radican.

Y si ahora son parte de las 20 jugadoras que hacen al preseleccionado, la aspiración mayor es que sus nombres queden en la lista final, la que le dará identidad a Bolivia en el hockey de los Juegos.

Están ilusionadas. Mireyza, de 27 años, se reconoce como una de las “más grandes”. Es “cuerva” desde los 16, edad en la que forjó su trayectoria en San Lorenzo, ahora al mando del DT Ignacio López. Mercedes, de 20 años, juega desde los 8.

Camila, de mamá boliviana y padre argentino, practica hace 10 años. Karen también entrena desde hace 12 años, el doble de tiempo que Daniela expone en su currículo deportivo personal (6).

Mireyza confesó: “Para nosotras es un orgullo ser convocadas y venir a sumar. Allá vivimos apasionadamente este deporte. Lo hacemos con mucho amor. La idea es contagiar y propagar el hockey”. Y aprovechará su estadía en el país para ir a Tarija. “Todos los años vengo. Me encanta Bolivia”.

Mercedes, hija de un orureño y una potosina, compartió: “Espero aportar bastante acá”.

De las cinco “cuervas”, una sobresale por el sentimiento dividido que experimenta, pues también es de River Plate. Ella es Karen, quien elevó su voz para interrumpir a una de sus compañeras cuando ella decía que todas son hinchas del equipo del que es fanático Marcelo Tinelli. “¡No! Yo soy de River, pero le tengo amor a la camiseta que represento”.



NACIONALIZACIÓN Y TRABAJOS Para jugar por Bolivia en Odesur 2018, las jugadoras foráneas tendrán que tramitar la doble nacionalidad, proceso que supone unos meses. “Sería cuestión de tiempo, nada más”, analizó Daniela.

Todas ellas, junto a otras 15 jugadoras locales, comenzaron ayer con el campamento nacional. En horas de la mañana se ocuparon del aspecto físico. En la sesión tuvieron algunos inconvenientes con la resistencia debido al cambio de clima.

Ya en la tarde, el cuerpo técnico hizo énfasis en el juego en sí mismo.

Otro de los aspectos que toma en cuenta el ente federativo para reforzar el ánimo del plantel es el uso de videos. El titular de la Federación Boliviana e Hockey, Carlos Rosales, comentó que, en el plan, figuran charlas con el profesor argentino Daniel Santi.

La intención es compactar el funcionamiento de las preseleccionadas, que comienzan a conocerse.

Lo mismo sucede con el equipo masculino, que también concentra en la Llajta.

Son 20 nacionales que. durante la mañana, trabajaron de lleno en el juego.

A diferencia de la rama femenina, los jugadores cuentan con poca experiencia en el hockey. Durante la sesión entera estuvieron bajo la mirada atenta de Santi, que los orientó en todo momento.



PLAN B ES SUCRE Rosales informó que el siguiente encuentro será, tentativamente, en la capital del país. Esto, debido a que el Capriles entrará en proceso de refacción.

El objetivo es abaratar costos en la concentración, tomando en cuenta que en Sucre se encuentra la Villa Bolivariana, con lo que se ahorrará en hospedaje.