El príncipe Enrique ha confesado en una entrevista que ningún miembro de la familia real británica tiene deseos de ocupar el puesto de rey o reina, pero que se hace por el bien común del Reino Unido.

"Estamos involucrados en la modernización de la monarquía británica. No estamos haciendo esto por nosotros mismos sino por el bien mayor de todos...", explicó el hijo menor del príncipe Carlos de Inglaterra a la revista Newsweek.

"¿Es que hay alguien en la familia real que quiera ser rey o reina? No lo creo, pero vamos a cumplir con nuestra responsabilidad cuando llegue el momento adecuado", aseveró. Conocido por su espontaneidad y naturalidad, también aseguró que tanto él como su hermano, el príncipe Guillermo, y la esposa de él, Catalina, tienen el objetivo de modernizar la monarquía británica y darle un toque personal.

"Queremos seguir con el ambiente positivo que ha conseguido la Reina (Isabel II) durante más de 60 años, pero no vamos a intentar ocupar su lugar", agregó.

Durante la entrevista, habló además de la muerte de su madre, la princesa Diana, y de los momentos especialmente difíciles que atravesó tras su fallecimiento, algo que ha empezado a hacer con relativa frecuencia en los últimos meses.

"Mi madre acababa de morir, y tuve que andar un largo camino detrás de su ataúd, rodeado de miles de personas que me miraban mientras millones más lo hacían en la televisión", declaró el príncipe Enrique.

Pese a las dificultades por las que ha pasado, el príncipe Enrique, uno de los miembros de la familia real que más polémicas ha protagonizado, afirmó que entiende la atracción que siente la gente por la monarquía británica.

"No queremos diluir la magia... El público británico y el mundo entero necesita instituciones como esta", opinó.

El príncipe promociona la organización Heads Together para desestigmatizar las enfermedades mentales, en una organización impulsada por él y los duques de Cambridge.