Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 09:52

TRADICIÓN RELIGIOSA /// LA ESCULTURA SE ENCUENTRA EN LA CIUDAD VIEJA DE JERUSALÉN.

La Tumba de Jesucristo ya está restaurada

La Tumba de Jesucristo ya está restaurada



A dos días de su presentación pública, la cúpula y el Edículo que protegen la Tumba de Jesucristo, en Jerusalén, aparecen como nuevos luego de diez meses de restauración para recuperar el lugar más sagrado del Cristianismo, destacó EFE.

La responsable de las obras, Antonia Maropoulou, confirmó a EFE la finalización de los trabajos "a tiempo" y serán presentados el miércoles con la retirada de los últimos paneles que cubren la zona de obras en el epicentro de la Iglesia del Santo Sepulcro, en la Ciudad Vieja de Jerusalén.

Donde la tradición cristiana sitúa el entierro y resurrección de Jesús, un equipo griego liderado por Maropoulou trabajó desde julio de 2016 en una intervención de urgencia para evitar que el venerado lugar se hundiera.

"Ahora se puede ver el color y la textura, las inscripciones, los frescos", dijo Moropoulou junto a la centenaria estructura de estilo barroco otomano, conocida como Edículo, construida entre 1809-1810.

Además del visible lavado de cara de todo el exterior del armazón, destaca como novedad la cruz greco-ortodoxa sobre lo alto de la cúpula, recién pulida, que no existía antes de la rehabilitación.

"Es un símbolo que estaba en el proyecto original del Edículo pero no se puso porque las leyes otomanas prohibían exponer cruces en lugares públicos", declaró el franciscano y arqueólogo, Eugenio Alliata.

También se abrió una ventana dentro del habitáculo donde está el lecho de Jesucristo que ahora permite a los visitantes ver la piedra original de la cueva donde se socavó la tumba.

Los trabajos han consistido en una limpieza pormenorizada de las láminas de mármol que cubrían el Edículo y en reforzar su estabilidad para garantizar la protección de la cueva con el lecho.

Las obras han abordado también las filtraciones de agua subterráneas que afectan a la base pero, según el grupo científico, requerirá de un nuevo acuerdo para "estabilizar los cimientos".

Los bloques dañados del armazón han sido reparados, del mismo modo que se cubrieron las grietas con pegamento, rellenado fisuras y reforzado soportes para un "monumento que durará para siempre", resaltó la jefa griega de la rehabilitación.

A finales de febrero se retiraron las vigas de acero, colocadas por los británicos en 1947 para apuntalar la endeble estructura.

El equipo restaurador contó con un financiamiento de 6 millones -el doble de los 3 millones presupuestados-, con un 80 por ciento procedente de donaciones del exterior, según declaró Bonnie Burnham, expresidenta del Fondo de Monumentos Mundiales.

Moropoulou se mostró satisfecha con los trabajos y pide a la comunidad cristiana, incluidos los millones de peregrinos que recibe cada año, “que lo mantenga”, y dejen de poner velas encendidas próximas a la estructura, lo que ha dañado y ennegrecido progresivamente el mármol. La griega destacó que la restauración logró unir ciencia, historia y valores.