Los proyectos estrella dejaron de ser una figura atractiva con la que los alcaldes de turno se posicionaban ante la población para impulsar la gestión municipal desde su perspectiva propia. Actualmente no existe esa denominación y las autoridades municipales mencionan un conjunto de proyectos como las acciones más importantes para fortalecer el desarrollo urbano de nuestra ciudad entre las que están: el saneamiento de las lagunas Alalay y Coña Coña y el río Rocha, la nueva terminal de buses, el Corredor Vehicular Quintanilla, unidades educativas modelo, hospitales de segundo nivel, estación de control de emisiones vehiculares y otras. Entonces uno se convence que realmente no son proyectos estrella sino más bien estrellados porque ya se los menciona desde hace cinco o tres gestiones y no existe un avance importante en su gestión. ¿Será que se les acabó las luces en cuanto a la gestión de desarrollo municipal?, ¿será que no existen las capacidades técnicas en la institución municipal para no poder innovar en el desarrollo de la ciudad? o ¿será, definitivamente, que la posibilidad de captar financiamientos y concertar proyectos concurrentes se acabó de la noche a la mañana? ¿Qué es lo que está pasando con la gestión municipal? Intentemos algunas respuestas a las interrogantes; en primer término, la gestión actual tiene interesantes capacidades técnicas pero no suficientes para respaldar al Alcalde como un líder capaz de capturar la atención y establecer una mística de trabajo eficaz y sostenida, por otro lado, el contexto normativo y administrativo es nuevo para el personal actual que no termina de entender lo que debe hacer y la forma que debe realizar sus funciones. También lo que se nota es una inexperiencia total en el área legal, administrativa y financiera lo que no permite a la municipalidad mostrarse como una instancia solvente y capaz de generar un plus en sus captaciones de recursos económicos para impulsar créditos que respalden acciones de verdadero impacto social en la comunidad. De capacidad de concertación y corresponsabilidad ni hablar porque es donde mayor debilidad existe, solo mencionar las constantes peleas sin sentido con autoridades de la Gobernación y los ministerios del actual Gobierno. Hay un dicho que deben entender las autoridades municipales, no solo de pan vive el hombre, se ha extraviado la capacidad de leer lo que la población demanda y, en base a las potencialidades, impulsar una dinámica que pueda ser respaldada con la participación de los actores del desarrollo municipal. Son momentos de cambio en la forma de gestión de las instituciones públicas, señor Alcalde, entienda lo que la población le demanda no lo que sus correligionarios equivocadamente le dicen.