Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 13:26

Responsables de Alalay no han hecho casi nada en diez meses

Responsables de Alalay no han hecho casi nada en diez meses


Han transcurrido diez meses desde que miles de peces aparecieron muertos en la parte norte de la laguna Alalay (fue el 10 de marzo de 2016), pero los responsables del Comité de Recuperación, Mejoramiento y Preservación de la Laguna Alalay (Crempla) no hicieron casi nada para solucionar ese problema ambiental.

Los hechos demuestran que de nada sirvieron las protestas de los ambientalistas, de los vecinos que viven en los alrededores de la laguna, de los expertos y científicos que por años hacen seguimiento a todo lo que sucede en la Alalay.

El presidente del Comité, César Navia, reconoció a OPINIÓN que el plan de emergencia, que se aplica desde el 16 de marzo de 2016, “no dio resultados”. Es más, admitió que ni siquiera conocen el tipo de cianobacterías (organismos microscópicos tóxicos) que hay en el espejo de agua.

Explicó que las acciones del plan no responden a lo que necesita la laguna. Como ejemplo puso los oxigenadores y los pozos. En el caso de los primeros, no dan resultados porque no se puede oxigenar un espejo de agua que solo tiene 80 centímetros de profundidad, cuando lo normal es de tres metros. “Es imposible que los equipos trabajen en esas condiciones. No dan resultados”.

Para la perforación de los dos pozos, que no se concretó, pero que tenían que aportar agua limpia para el caudal de la laguna, “ni siquiera se hizo un estudio social para ver si podríamos afectar a los vecinos que también tienen pozos para proveerse de agua”.

Navia también cuestionó la determinación de abrir las compuertas para que entre agua de los ríos Rocha y Mailanco, porque pese a que con las lluvias incrementaron “un poco su caudal, están muy contaminados” y son el cultivo para que se reproduzcan las cianobacterias.



ESTUDIOS Navia informó que dentro de unos diez días, es decir, casi a fin de mes, se conocerían los resultados de los estudios de ADN que realizará la Universidad Policial (en La Paz) a las cianobacterias.

“No sabemos si son patógenas (causan enfermedades infecciosas) o de qué tipo son. Tenemos que definir eso para reencaminar las acciones que debemos realizar en la laguna”.

El año pasado, el alcalde de Cochabamba, José María Leyes, señaló que si se comprueba que las cianobacterias provocan daños al ser humano, de forma inmediata se declarará en “cuarentena” a la Alalay y sus alrededores.

En marzo, el biólogo e investigador de la Universidad Católica Boliviana (UCB) Eduardo Morales alertó sobre la presencia de las cianobacterias en la laguna y afirmó que fueron las causantes de la muerte de los platinchos (peces). Advirtió que “son dañinas para la salud”. El 28 de octubre del año pasado, el experto sugirió a las autoridades del Crempla y a la Alcaldía que se debería restringir el acceso de las personas a la laguna para evitar riesgos. Asimismo, propuso que las personas que trabajan en el lugar se protejan con guantes, barbijos y otros para evitar que tengan contacto con el agua y los lodos, porque ahí están las bacterias.

El municipio tomó en cuenta las recomendaciones unos días, pero luego las cosas volvieron a ser como antes.

La alarma volvió a encenderse en noviembre del año pasado, cuando se verificó que estudiantes de la unidad educativa Fidel Araníbar, situada a 200 metros del lado oeste de la laguna Alalay, sobre la avenida 9 de Abril, estaban utilizando barbijos para protegerse de las cianobacterias y evitar sentir los malos olores que emanan del espejo de agua.

En ese mes, el Servicio Departamental de Salud (SEDES) movilizó una unidad móvil con médicos para que controlen el estado de salud de los vecinos. Ese trabajo fue sostenido una semana, luego todo quedó en el olvido de las autoridades.



MOVILIZACIÓN La muerte de los peces movilizó a instituciones, especialistas, científicos, ambientalistas y ciudadanos. Cuatro días después del dantesco hallazgo (el 14 de marzo), el Crempla declaró a la laguna Alalay como “zona de emergencia”. El 16 de marzo, aprobó un plan de salvataje para la laguna. Tenía 17 tareas que iban desde campañas de información y concienciación, hasta la perforación de pozos y sistemas de oxigenación para el agua.

El 20 de mayo, la Alcaldía de Cercado aprobó el Decreto Municipal Nro. 053/2016 que dispuso la declaratoria de emergencia municipal en la laguna Alalay y su entorno.



NO HAY COORDINACIÓN El presidente del Crempla, que está en el cargo hace más de tres meses, afirmó que “no hay coordinación” entre los representantes de las ocho instituciones que conforman el Comité (ver datos en la columna).

“Hasta ahora no hemos encontrado el rumbo del Comité. Debería ser propósitivo y no esperar sentado que las demás instituciones trabajen”.

Reconoció que pueden existir “intereses políticos e institucionales” en el Comité (hay tres instituciones que responden al Movimiento Al Socialismo, contrario al partido del alcalde de Cercado, José María Leyes), pero no se animó a dar detalles “porque sería desleal”.