El pleno del Supremo Tribunal de Brasil respaldó por unanimidad la decisión del magistrado Teori Zavascki, que suspendió el mandato del diputado Eduardo Cunha, presidente de la Cámara Baja, inmerso en graves asuntos de corrupción en Petrobras.

Los otros diez miembros de la Corte aceptaron los argumentos presentados por Zavascki, con lo que se separó a Cunha del cargo y dejó en manos del Legislativo la decisión sobre una eventual pérdida definitiva del mandato.

Entre las presuntas irregularidades establecidas por el fiscal general del Estado, Rodrigo Janot, están:

1.- Sospecha de que interfirió en las investigaciones del caso Lava Jato y corrupción en Petrobras de las que es uno de los principales blancos.

2.- Llegó a "amenazar" al que fue relator del proceso de cese del propio Cunha en el Consejo de Ética de la Cámara, Fausto Pinato, del Partido Republicano. Pinato aseguró en diciembre que temía por su vida y contrató escolta.

3.- Presionó para que se realizaran pagos de sobornos dentro de la trama corrupta.

4.- Intentó "intimidar a quien osó estar en contra de sus intereses".

5.- Abusó de su poder con la finalidad de cambiar la ley para impedir que un delator corrija su declaración.

6.- Aplicó diversas estrategias para obstruir las investigaciones de la justicia en su contra.

7.- Intentó obstruir el proceso de cese interno que se le abrió en la Cámara por haber mentido con respecto a su posesión de cuentas ilegales en Suiza.

8.- Cunha asumió su cargo como presidente de la Cámara en febrero de 2015, cuando el Partido del Movimiento Democrático de Brasil (PMDB) aún era el principal partido de la coalición de Gobierno que apoyaba a la presidenta Dilma Rousseff. No obstante, empezó una guerra contra el PT y el Ejecutivo cuando su nombre fue incluido en la lista de sospechosos del caso Lava Jato.

9.- En julio del pasado año, Cunha anunció su ruptura con el Gobierno, al que ya había empezado a torpedear con una agenda paralela de leyes y medidas no prioritarias o incluso perjudiciales para el ejecutivo, así como el bloqueo de las que partían del equipo de Rousseff.

10.- Cunha es sospechoso de ser uno de los principales beneficiarios de la trama corrupta en torno a Petrobras, que desvió más de 2.000 millones de dólares de las arcas públicas.

11.- Pago de “mordidas” a empresarios de la construcción, directivos de Petrobras e importantes cargos políticos de diversos partidos brasileños.

La investigación, que arrancó en marzo de 2014, fue el principal detonante de la grave crisis política que vive el país y que podría llevar al vicepresidente Michel Temer a asumir la jefatura de Estado, al menos temporalmente, si Rousseff es destituida de su cargo.

El impeachment de Dilma Rousseff que puede alejarle temporalmente de la presidencia el próximo día 11 de mayo si el senado vota con mayoría simple a favor de su cese.

La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, celebró que el Tribunal Supremo haya suspendido provisionalmente el mandato del jefe de los Diputados y aseguró sobre la respectiva medida cautelar que "mejor tarde que nunca".

Antecedentes

Chantaje

La presidenta Dilma Rousseff afirmó que el proceso parlamentario que la próxima semana puede apartarla del cargo comenzó a raíz de un "chantaje" del propio Cunha, que esperaba que el gobernante Partido de los Trabajadores (PT) lo apoyara y rechazara la apertura de un juicio contra él en la Comisión de Etica de la Cámara de Diputados.

“Golpista”

Rousseff reiteró que el proceso para desalojarla del poder es "golpista" porque no cometió ningún "delito de responsabilidad".

Los impulsores del proceso aseguran que la Mandataria incurrió en delito de responsabilidad al contratar créditos de los bancos públicos sin autorización del Congreso para pagar gastos corrientes del Congreso y maquillar los balances fiscales.

Vicepresidente

El vicepresidente Michel Temer del PMDB podría reemplazar a Rousseff, pero él también está en la cuerda floja. El tercero en sucesión era Cunha.

La última defensa de Dilma

¿Será que tendremos que llegar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos para demostrar que aquí no se respeta la garantía del debido proceso?", inquirió el abogado general del Estado José Eduardo Cardozo a los senadores de la comisión, que este viernes decidirá el curso del trámite del juicio político para la destitución de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.

Cardozo compareció ayer ante la comisión de 21 senadores y pareció "quemar las naves" al jugarse como última carta la posibilidad de apelar una eventual decisión contraria a Rousseff ante foros internacionales.

Cardozo intentó convencer a los senadores, en su clara mayoría favorables a la instauración del juicio político contra Rousseff, de que no existen méritos jurídicos para un proceso que, a su juicio, es "nulo" y está "viciado" desde su propio origen.