Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 15:20

Carretera en el TIPNIS

Carretera en el TIPNIS
La Sociedad de Geografía e Historia ha tomado conocimiento de la ley departamental emitida por la Gobernación de Cochabamba que actualiza y prioriza la construcción de la discutida carretera “Villa Tunari-San Ignacio de Moxos”. El proyecto conlleva la oposición de las comunidades indígenas del territorio del TIPNIS que dio lugar a masivas marchas, graves confrontaciones y conflictos que no han sido superados pese a las repercusiones nacionales e internacionales en resguardo de la preservación de dicho parque nacional de reserva ecológica y de vida comunitaria aborigen.

El Parque Nacional Isiboro Sécure es vulnerable al proyecto carretero cuyo diseño oficial directo ocasionará un grave impacto ambiental por la contaminación, el deterioro ecológico, los agudos problemas humanos, la explotación forestal y mal uso de la tierra, y cambios ambientales previsibles; su incidencia en el calentamiento atmosférico y la destrucción de la capa de ozono, la pérdida de la biodiversidad vegetal y animal, de la masa forestal amazónica; y sobre todo, el trastrocamiento de la vida misma de los habitantes de aquellas zonas en todo orden como consecuencia de la segura devastación de los recursos naturales y la consiguiente destrucción de las reservas del suelo fértil en selva virgen; que, por otra parte, contribuirá sin duda - como viene sucediendo en otras partes del mundo - a la importante elevación de la temperatura planetaria y los gases contaminantes que sofocan grandemente las zonas comprometidas.

Se trata pues, de un problema que incide en la salud de todos los habitantes del país, es imprevisible y, más que eso, está relacionado íntimamente con todos los valores comprometidos y compatibles entre un desarrollismo económico extractivo y depredatorio y la urgente demanda de contribuir como nación al mejoramiento de la ecología mundial, principalmente regional, conscientes de su gravedad actual y futura, vale decir, definirnos por un auténtico y sincero respeto a la Madre.

Respeto al manifiesto a la Carta de la Tierra y los Derechos de la Naturaleza proclamados siempre por nuestro Gobierno en todos los eventos nacionales e internacionales; o al contrario, por un comportamiento ajeno que, a ultranza, parece orientarse sólo a la conquista económica de los territorios de los pueblos indígenas cuya respetable posición principista está totalmente esclarecida por su desacuerdo a la construcción de la carretera por el corazón del TIPNIS, habiendo dado, sin embargo, su conformidad a una carretera por otra ruta más adecuada y menos perjudicial sugerida por la Sociedad de Ingenieros de Bolivia. Tal criterio ha sido respaldado por el pronunciamiento de una gran parte de la Comunidad Nacional.

La Sociedad de Geografía, Historia y Estudios Geopolíticos Cochabamba, pide y exige a la Gobernación y al propio Gobierno nacional, en bien de la paz social, oír la voz profundamente humana de los pueblos del TIPNIS, cuyo clamor para preservar a toda costa su estado de naturaleza y no ser afectados con la incrustación de una carretera en el centro neurálgico territorial y existencial. Hay que repensar seria y responsablemente la dimensión del daño que implicará desoír este pedido y no construir la carretera por el centro de la reserva forestal y humana, considerando más bien, con la aquiescencia de todos los bolivianos, que el proyecto se ejecute por un lugar que no cause daño y constituya un grave precedente.

Cuando el Gobierno prepara el enfrentamiento violento en el TIPNIS, entre corregidores adeptos a la carretera contra indígenas genuinos no cocaleros, este pronunciamiento es totalmente pertinente.