Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 20:28

MÁS ALLÁ DEL MARCO LEGAL ES NECESARIO TRABAJAR EN EL ÁMBITO EDUCATIVO Y CULTURAL PORQUE LA SOCIEDAD AÚN ES CONSERVADORA

Rolando Villena: “Reclamamos una norma que permita la unión civil gay”

Rolando Villena: “Reclamamos una norma que permita la unión civil gay”

El Defensor del Pueblo, Rolando Villena, considera que el país debe iniciar un proceso legal para garantizar el enlace matrimonial entre personas del mismo sexo.

Durante una entrevista con el diario OPINIÓN, Villena se refirió al casamiento gay como un acto que es posible instaurar en la sociedad, a través de procesos educativos.

P: ¿La prohibición del matrimonio gay, establecida en la Constitución Política del Estado de Bolivia, puede ser tipificada como un acto de discriminación hacia las personas con preferencias sexuales diferentes?

R: Es probable que las personas con preferencias sexuales diferentes interpreten este detalle constitucional como un tipo de discriminación, pero es una percepción bastante sesgada del texto legal.

Sin embargo, más allá de la visión legalista, es necesario enfocar el problema desde la realidad y dejar de pensar -erróneamente- que las normas pueden resolverlo todo. Por ello, tenemos que iniciar un debate que vaya más allá de la Asamblea Legislativa.

Para esto se debe trabajar desde el ámbito educativo y cultural porque todavía nuestros escenarios sociales son conservadores.

P: Si se habla de iniciar un proceso de concienciación social ¿Cuál es la posición de la Defensoría del Pueblo? ¿A favor o en contra del matrimonio gay?

R: Tenemos que abrir nuevos escenarios en los que estas personas se sientan reconocidas como seres humanos, por ello como Defensoría del Pueblo estamos a favor de la dignidad de este sector y del reconocimiento que claman.

Si nosotros como entidad excluiríamos a las personas con preferencias sexuales diferentes estaríamos en contra de los principios generales de los derechos humanos.

Es por eso que reclamamos una normativa que permita -a esta población- establecer una unión civil para que protejan sus intereses de a dos.

Sin embargo, la Defensoría plantea únicamente una unión de tipo civil porque no podemos ir más allá ya que nos enfrentaríamos a una corriente religiosa que está en contra de todo esto y que tiene un discurso que condena a este tipo de personas.

Lo único que planteamos es que ellos tengan un espacio en el que puedan vivir con tranquilidad porque el sufrimiento que llevan es profundo.

P:  Refiriéndonos aun a estas personas, desde su percepción ¿Cuál de las siguientes dos acciones se ejecutan más en el país: prevención o sanción de la homofobia?

R: En términos generales estamos en la línea de la educación, es decir, la prevención de las actitudes homofóbicas.

Sin embargo, también estamos inmersos en la etapa de seguimiento de aquellos casos que son de conocimiento público, como el que sucedió recientemente en Cochabamba.

Este hecho ratifica que en el país hay homofobia y aún más cuando se evidencia que los operadores de justicia no tipifican las agresiones como “Homofobia” y más bien buscan otra sanción para condenar a los ofensores como: “Robo Agravado”.

P:  ¿La Defensoría realiza el debido seguimiento a los casos de homofobia suscitados en el país?

R: Sí, organizamos reuniones con las personas agredidas para sumarnos a sus peticiones porque los niveles de intolerancia que se dan hacia ellos son elevados.

Por ejemplo, a menudo registramos casos de profesionales calificados que tras revelar que son homosexuales inmediatamente son despedidos o bien las puertas de toda fuente laboral se les cierra.

Lo peor es que las personas entre comillas “normales” excluyen a los de preferencias sexuales diferentes sin considerar que están perdiendo a un recurso humano valioso.

Y algo aún más agravante es que los Transexuales, Lesbianas, Gays, entre otros, continúan profesionalizándose y uno se pregunta ¿Con qué futuro?

P: ¿El índice de acciones homofóbicas en el país está en ascenso o descenso?

R: Las prácticas homofóbicas en el país están en ascenso, sin embargo los casos que registramos son emblemáticos.

Lo bueno es que los homosexuales ya consideran a la Defensoría del Pueblo como un espacio que los escucha y que tiene la capacidad de ayudarlos en sus dificultades.

Además, nosotros les sugerimos una mejor organización para enfrentar a los actos discriminativos.