El histórico título que logró Bolivia en el Sudamericano de 1963 quedó inmortalizado con el descubrimiento del monumento construido en el ingreso de la tribuna de preferencia del estadio Félix Capriles.

Una circunferencia de un metro de diámetro, aproximadamente, y dentro de ella, la cifra 63, donde resalta el mapa de Bolivia sobre el continente Sudamericano. Además de dos balones  de la época (Litoral), tallados en piedra.

Al pie del monumento, en una plaqueta figuran los 22 nombres de los héroes que dejaron en alto el nombre del país. Además de los integrantes del cuerpo técnico que hicieron posible esta hazaña.

El descubrimiento del monumento estuvo a cargo del gobernador del Departamento, Edmundo Novillo quien aprovechó la oportunidad para felicitar a los héroes y expresar su sorpresa al conocer que Cochabamba era el escenario de la vuelta olímpica.

“Tenía la idea de que los campeones del 63 dieron la vuelta en el estadio de La Paz, quedé sorprendido al enterarme que ese logró fue en Cochabamba”, declaró Novillo.

 En su alocución, la autoridad manifestó que los jugadores de esa época no gozaban de un sueldo, premio o prima, simplemente lo hicieron por un sentimiento llamado Bolivia.

“Era puro sentimiento, garra y cariño a la divisa, no importaba nada más que ganar o ganar el partido”, afirmó Fortunato Castillo, jugador del 63.