Una multitudinaria marcha liderada por autoridades de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) y representantes de los médicos y de los trabajadores en salud tomó ayer las principales calles de la ciudad para protestar en contra del Gobierno. Los manifestantes lo calificaron de “incapaz y soberbio”, por no poner atención a sus demandas.

Los universitarios piden la modificación de la Ley Financial, en relación al tope salarial impuesto para los docentes de la universidad pública. Asimismo exigen respeto a la vigencia del derecho a la compatibilidad entre la actividad docente y la profesión en servicios públicos de salud.

“El hecho que de no se permita que el docente, en el ejercicio de su profesión, pueda enseñar a los estudiantes no lo aceptamos. El país no tiene fuentes de investigación especializada para la enseñanza”, señaló el secretario ejecutivo de la Federación Universitaria Docente (FUD), Bernardo López.

Los trabajadores en salud piden la inclusión del sector público a la Ley de General del Trabajo, y la homologación de los sueldos a la Caja Nacional de Salud (CNS).

Por su parte, los médicos y enfermeras rechazan la ampliación de las 8 horas de trabajo y la restricción de la docencia durante el servicio médico en centros médicos públicos.

La secretaria ejecutiva de la Federación de Trabajadores en Salud, María Gamboa, calificó el seguimiento que el director del Servicio Departamental de Salud hace a los trabajdores, como “acoso laboral”, razón por la cual fue declarado “persona no grata”. El presidente del Colegio Médico, Rommel Pereira, criticó la actitud de autoridades que suspendieron el diálogo por un día.