Luego que el coronel Jorge Arteaga fuera sentenciado a 15 años de cárcel por haber matado a Jorge Guzmán, asesino confeso de su hijo, la abogada de la familia Guzmán presentó el 14 de marzo una apelación manifestando su desacuerdo con el fallo y exigiendo 30 años de prisión. Un día después, el 15 de marzo, la fiscal Faridy Arnez también presentó una apelación usando exactamente el mismo tenor que la abogada de los Guzmán.

La fiscal Faridy Arnez dijo, ayer en la tarde, que solicitará las dos apelaciones para compararlas, pero adelantó que si bien pueden coincidir en el argumento central, sobre la atenuante especial de ser militar, no pueden ser exactas porque la Fiscalía tiene su propia posición.

PRUEBA Los abogados de Jorge Arteaga consideran este “plagio” como una prueba de la parcialidad y confabulación del Ministerio Público con una de las partes. Arteaga exhibió las dos apelaciones interpuestas y se verificó que tenían las mismas frases, las negrillas signos y subrayados.

“Esto significa que la abogada tuvo que pasarles en pen drive, en diskette o por correo electrónico su apelación para que la Fiscalía la presente también y pida 30 años para mí”, declaró Arteaga. Los abogados dijeron que es la primera vez que sucede algo así, pues un recurso de apelación es un trabajo intelectual que debe basarse en las pruebas y convicciones propias, no las de otra parte y, menos aún, la de una parte interesada.

Ante estas pruebas, que podrían servir para iniciar procesos penales según los defensores, Arteaga presentó a la presidencia del Tribunal de Sentencia, una solicitud de que no tome en cuenta las peticiones de la Fiscalía y la abogada de la familia Guzmán, por “ser nulas de pleno derecho y por comprobarse con este plagio el consorcio que existe entre la Fiscalía y la parte acusadora”.