Luego que autoridades municipales y departamentales dieran las garantías para iniciar la jornada educativa en el colegio Bolivar, ayer, por cuarto día consecutivo el escenario fue más conflictivo y sin indicios de solución.

La mañana de ayer las 10 estudiantes llegaron al colegio, entraron solas bajo la mirada vigilante de sus papás, pero al ver la presencia de un grupo de padres en la puerta retrocedieron y esperaron a las autoridades.

La presencia de policías antimotines en la puerta del colegio alarmaba a cada madre que llegaba al establecimiento. Después aparecieron autoridades de la Defensoría de la Niñez y de la Dirección Departamental de Educación (DDE) y recién las adolescentes ingresaron en medio de un cordón de funcionarios.

Temerosas y apiñadas, las estudiantes ingresaron al aula donde las clases ya se habían iniciado. Tomaron asiento y a los pocos minutos de reiniciada la clase, padres y madres de familia, y estudiantes gritaban desde afuera “¡Salgan!, ¡Salgan!”.

Las autoridades, que continuaban en el aula, trataron de impedir el ingreso de los padres de familia y empezaron empujones en la puerta.

Ante la insistencia, los estudiantes varones salieron hasta por las ventanas uno tras otro, todos, excepto uno, al que le parecía “absurda” esa conducta.

“Me parece muy mal esa actitud, nos estamos haciendo ver mal. ‘Son machistas’, nos están diciendo (...). Que entren nomás (las estudiantes) porque nos critica la gente”, expresó este alumno. Frente a esta actitud las jóvenes lo felicitaron con aplausos. Los compañeros del alumno “disidente”, le hicieron amenazantes gestos de degüello, y luego se fueron a las canchas.

“Nosotros como padres de familia hemos garantizado el ingreso y permanencia de esas alumnas (que) han ingresado, pero como padres tenemos todo el derecho de retirarnos para tomar otras medidas”, dijo contradictariamente uno de los representantes.

Luego de una confrontación verbal entre padres y alumnos contra autoridades de la Defensoría y una delegación de diferentes distritos, los estudiantes cantaron a viva voz el himno del colegio y al concluir abandonaron el establecimiento para emprender una marcha hacia la Plaza Principal y luego a la DDE.

La marcha estuvo encabezada por alrededor de 200 madres de familia, seguida de los estudiantes y en la cola un reducido grupo de papás.

Mientras esto ocurría en la calle, el maestro abandonó el aula donde estaban las alumnas, para asistir a una reunión de emergencia con sus colegas que duró toda la mañana.

En la larga espera para retornar a clases, las muchachas formaron un círculo de plática con el único compañero que se quedó con ellas, y escuchaban música por celular, jugaban y platicaban. Hacia el medio día, abandonaron el colegio con el mismo resguardo de la Defensoría. “Voy a continuar aquí, no hice nada malo y estoy en mi derecho. Lo que me sorprende es que son más mamás las que no nos quieren aquí”, decía una alumna.

Frente a este panorama, autoridades de la Oficina Jurídica de la Mujer anunciaron procesos penales contra seis padres de familia por el delito de “discriminación”. La Dirección Departamental de Educación investiga si existen maestros que instigan la actitud negativa de maestros o estudiantes para iniciarles proceso administrativos.

Nuevo intento de iniciar clases

Ante el ambiente tenso, una reunión entre el director departamental de Educación, Jorge Ponce, el director distrital de Cercado I, Nicolás Siles, la representante de la Oficina Jurídica para la Mujer, Julieta Montaño, reiteraron la decisión de mantener a las 10 estudiantes e iniciar clases. “La determinación es que no se da un paso atrás”, enfatizó Ponce.

Asimismo sugirieron pedir al Ministerio de Educación la suspensión de clases en tanto no se tengan garantías, sin embargo esta posición fue descartada luego de otra reunión. “Mañana (hoy) vamos a hacer todo el esfuerzo para reanudar las clases, los padres de familia no son los que deciden las cuestiones administrativas”, dijo Siles.

Los padres de familia niegan que las alumnas hicieron fila para su inscripción y rechazan su presencia aduciendo imposición de las autoridades.

Ponce informó que se investiga la participación de maestros y estudiantes. “A los maestros se les podría iniciar un proceso administrativo si se identifica alguna actitud de incitación”, añadió la autoridad.

100 Años de servicio sólo con varones

Padres 

Los padres de familia pedían en reuniones que el colegio Bolívar reciba inscripciones solo a estudiantes varones, hasta cumplir los 100 años de creación. El centenario de la unidad educativa será el 24 de julio de 2013. Actualmente alrededor de 500 alumnos forman parte de la población estudiantil.

Indignación desde las inscripciones

PREJUICIO

“Cuando vine a hacer fila una mamá, que era de pollera, me dijo: ‘¿Por qué le quieres exponer así a tu hija?, ¿Por qué aquí siempre?, ¿La quieres prostituir? (...) qué cosa pues’. Dentro de mí nomás después dije: Acaso éste es un colegio de violadores, maleantes, qué cosa pues”, expresó un padre de las niñas. 

Un padre de familia retiró a su hija 

Espera

Luego de varias horas de espera, sin el docente en el aula, los familiares de una de las jóvenes persuadieron a su padre de llevársela. “Escuchamos que le decían: ¿Para que vas a hacer tanto problema?, buscaremos otro colegio; pero no sabemos si volverá o no, él no dijo nada”, relataron.

Maestros en estado de emergencia 

Asamblea

Los maestros debatieron durante toda la mañana de ayer la posición que asumirán en el conflicto, sin llegar a una conclusión. Hoy sostendrán una asamblea para elaborar un voto resolutivo. Algunos insisten en que el procedimiento de inscripción fue errado y que las autoridades no dialogaron en el proceso.