La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) considera que el 2012 no debe efectuarse un incremento salarial porque aún no se conoce los efectos de la crisis económica internacional. Los fabriles exigen un aumento superior al 10 por ciento debido a los precios altos de los principales artículos de la canasta familiar.

El presidente de la CEPB, Daniel Sánchez, señaló que el anuncio del ministro de Economía Luis Arce Catacora, de que está en duda el incremento salarial para el 2012 debido a la existencia de un déficit presupuestal del 1,5 por ciento, es certero toda vez que aún no se conoce los impactos negativos de crisis económica mundial.

“Si la crisis nos afecta, también va afectar al empleo y las empresas van a tener que rebajar el personal, de acuerdo a lo que se pueda pagar”, manifestó el ejecutivo al indicar que en los últimos cinco años los salarios se incrementaron en un 50 por ciento, empero pidió mantener la calma y no ser irresponsables dando cifras de incremento más aún cuando el Gobierno señaló que este año se cerrará con cifras rojas.

En ese marco, Sánchez manifestó que antes de pensar en un incremento salarial se debería pensar en cómo encarar los efectos de la crisis económica internacional porque pondría en riesgo las fuentes laborales el 2012.

Sin embargo, los fabriles ya exigen un incremento salarial para el 2012 mayor al 10 por ciento porque desde el decreto del gasolinazo promulgado y luego abrogado por el Gobierno de Evo Morales provocó el alza indiscriminada de artículos de primera necesidad.

“Más que un incremento es una reposición por la pérdida del valor adquisitivo”, explicó el dirigente de los trabajadores fabriles, Vitaliano Mamani, quien aseveró que a pesar de ser abrogado el Decreto Supremo 21060 los comerciantes incrementan el precio de diferentes artículos de la canasta familiar.

Por su lado, el ejecutivo de los fabriles de Cochabamba, Mario Céspedes, advirtió que “no aceptaremos que estén diciendo que va haber un bono, nosotros no somos rentistas, somos activos. Cada año siempre hay un incremento salarial, pero también hay que ver en cuanto se disparó la canasta familiar, en cuánto está la papa, entonces en base a eso tiene que haber un aumento salarial, por lo menos un 15 por ciento ”.